La
escritora Doris Poreda inició su conversación recordando cómo surgió la columna
periodística denominada Hestiario, en
1986, estimulada por los miembros del
Teatro Altosf de entonces, Silvia
Dioverti y Rafael Salvatore. Escogió el nombre de la diosa griega del hogar
Hestia, como una clave para reconstruir un modelo femenino alternativo por su
falta de aspavientos. En este sentido, los imaginarios proporcionados por la
literatura griega son muy adecuados para ilustrar situaciones del presente
debido a su universalidad y vigencia. “Todo lo que existió antes, existe hoy”,
señaló la autora.
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Profa. Doris Poreda Foto: Rafael Márquez Coronado (Ramaco) Artista Plástico |
A
través de la lectura de diez textos
comentados por la autora y la participación del público transcurrió amenamente
la velada. Con fino humor, los textos refieren las vicisitudes que esta Hestia
caribeña vive y sobrevive en nuestra querida Cumaná debido a la indolencia e
indiferencia de algunos habitantes y autoridades de la ciudad, como un mal
colectivo que todavía está por superar. Los textos son:
1. Cliente eres y en
cliente te convertirás: Desde el humor y la
ironía se refiere a cómo somos tratados cuando vamos de compras en cualquier
establecimiento comercial de Cumaná.
2. Mal Navideño:
Alude al ambiente pesadillezco que surge en los días navideños por el frenesí
de las compras y el “letargo del consumismo”, en palabras de la autora.
3. A un ladrón:
La única manera de defenderse de un ladrón que se ha introducido a robar en la
vivienda, es a través de la escritura, tal vez para exorcizar el delito, pero
también para devolverle al ladrón el golpe de la vida: “[…] Espero que tú
también hayas encontrado tu beneficio y que tus hijos hayan comido bien con el
fruto de tu esfuerzo. Pero, más que nada, te deseo que ellos estén ya
creciditos para cuando deban entender
por qué su padre murió de bala un mediodía cualquiera con el alma vacía y unas
prendas robadas en el bolsillo” (p.170)
4. Madre es una sola:
Se expresa con tristeza y dolor la rutina de la vida de una madre, quien nunca
descansa, ni siquiera en su vejez,
porque nunca tuvo tiempo de atenderse ella misma: […] “Luego se levanta, recoge
las últimas migajas de fuerza que le quedan, y se va a la cocina a preparar la
masa de las arepitas que “sólo a ella le quedan tan buena”, como dicen los
hijos cuando llegan de la calle. No ha tenido tiempo para preguntar por qué le
han sido confiados los estómagos y los destinos de la humanidad”. (p.142)
5. En Bus:
Otra circunstancia decembrina: viajar en autobús, y vivir una verdadera
odisea-pesadilla, en la que la autora recomienda en siete pasos la manera de
sobrevivir a esta experiencia.
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Foto: Rafael Márquez Coronado (Ramaco) Artista Plástico |
6. Cuando el gallo maneja:
Con humor y el recurso de la parodia, en
el texto se recrea los hábitos
del conductor del transporte público a través de la imagen de un gallo que
interrumpe el tránsito para piropear a las mujeres _“gallinita(s)
pisablepasable”_ en plena avenida Bermúdez: “Este gallo no es sencillo como el
gallo músico de Bremen […] Su nave lleva paisajes tropicales, letricas góticas
y números romanos por fuera; estampas de santos, advertencias, cortinitas y refranes
incordantes por dentro[…] Lo malo de este pajarraco es que no puede esconder la
procedencia de la familia gallinácea, prima de pavos, urogallos y otros
patarucos,de picop corto y poca monta, a la hora de cacarear[…](p.185)
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Foto: Rafael Márquez Coronado (Ramaco) Artista Plástico |
7. Desde Santa Inés de
Aguas Negras: La autora señaló que “desde la antigüedad el humor y la tragedia
se complementan. A veces, quien escribe cosas cómicas, tiene una gran tristeza”. Valiéndose de los juegos de palabras, el
humor y la ironía, se parodia el lenguaje de las antiguas crónicas para
referirse a Cumaná como “Santa Inés de Aguasnegras”, aludiendo con ello la
presencia de innumerables charcos de aguas negras como uno de los distintivos
de la ciudad, mientras que algunos de sus habitantes se ocupan de vender en la
calle “bingos de leche en polvo y aceite rancio”(p. 199) La tristeza matiza la
descripción del lugar en la voz de la cronista.
8. Día de no comprar: En este texto la voz relatora propone como
alternativa a la “deidad” Crisis, un día de parada: no realizar ningún tipo de
compras, ante el avasallante consumismo de los días navideños, para no caer en
la trampa de las compras innecesarias. Para ello se propone la creación de
un”Comité Nacional para el Control del hábito del Consumo”. Concluye el texto
con la invitación: “Ya saben, inscríbanse en el comité y participen de la
lujuriante sensación de pasar de largo ante las vidrieras repletas de
cachivaches. Verá cómo el año entrante comienzan a ofrecerle la misma mercancía
por la mitad de su precio”.(p.22)
9. Crónica de un golpe
frustrado: Alude a la escasez de leche que
también hubo en alguno de los años de la década de 1986 a 1996. En este
texto el golpe se refiere a la
circunstancia de lograr conseguir dos latas de leche pasando por un sinfín de
peripecias. Solo que la protagonista del relato llega tarde al sitio
clandestino en donde se vendía la leche.
10. Ruta al Sur:
Una manera de soñar con un progreso futurista para Cumaná, en la que la ciudad
y zonas circunvecinas aparecen rodeadas de fabulosas autopistas y líneas de
ferrocarril. Sólo que la protagonista del relato se ha quedado dormida en el
autobús y ha tenido ese fabuloso sueño.
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Foto: Rafael Márquez Coronado (Ramaco) Artista Plástico |
11. Oración de las garzas:
La lectura de este texto fue respaldada
con la obra musical del mismo nombre del compositor Hugo Sánchez Poreda, quien
la elaboró especialmente para este texto. La lectura con este fondo musical y
audiovisual se convirtió en un verdadero recitativo, en el que las garzas de Cumaná,
protagonistas del relato, dirigen su plegaria al Creador para que les permita
entender a los seres humanos, del porqué hacen las guerras, arruinan los
jardines, talan los árboles, ahuyentan la vida al botar la basura por todas
partes. Las garzas hacen su petición para salvar a ese ser humano: “ […] Pero
si no es así y en el hombre aún queda algo de tu gran espíritu, permite
entonces que se aclare su vista, se
afine su oído, y se ablande su endurecida piel. Que sepa oír la elocuencia del
viento, la música del río y el susurro de la laguna. Que vea todas las cosas
con los ojos de su perdida inocencia y comprenda que nosotras las garzas y
todas nuestras hermanas esperamos su regreso de la antigua magia en la que él y
nosotras seremos uno en ti.” (p.20)
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Don Amado Viera Foto: Rafael Márquez Coronado (Ramaco) Artista Plástico |
Con respecto a la novela ganadora
del premio Stefania Mosca, en imprenta, la escritora Doris Poreda señaló que
“acometió esa escritura para liberarse”, “atesorando el recuerdo como asidero,
lo único que se tiene desde la condición de extranjera”. Esta novela se
publicará en el año 2014.
Al final de la exposición de la
autora, el público opinó y dialogó con ella. Se dio la sorpresa de la
intervención de Don Amado Viera, escritor de Marigüitar, quien le regaló una
novela de su autoría a Doris Poreda. A su vez, la autora recompensó a los
asistentes, al rifar tres ejemplares de Hestiario.